Sin duda alguna el Karneval, o Carnaval en español, es una de las festividades más emblemáticas de Alemania, particularmente en Colonia y Düsseldorf, ciudades que por años han tenido una mega rivalidad por sus múltiples diferencias y eterna competencia. Pero, ¿Cuándo se celebra el Carnaval?, ¿por qué la gente se disfraza?, ¿de dónde surgió esta festividad? Y claro, para no dejar a un lado el chisme, ¿por qué Colonia y Düsseldorf se odian tanto?
¿Cuándo se celebra en el Carnaval?
La temporada de Carnaval, conocido en alemán como Karneval, Fasching o Fastnacht, empieza el día 11 del mes 11 a las 11 horas con 11 minutos. En esa perfecta alineación del tiempo da inicio a la popular quinta temporada del año, donde la vida social de los alemanes se vuelve una locura. Esta celebración dura hasta el Aschermittwoch, o sea, el Miércoles de Ceniza. Y no, no quiere decir que en este periodo los alemanes se la pasan enfiestados todos los días. Existen ciertas celebraciones de por medio, pero lo más destacado pasa al principio y al final de la temporada.
Los disfraces
Lo particular de esta festividad son los disfraces; no hay Carnaval sin disfraces y absolutamente todas las personas se disfrazan. Estos personajes, llamados Jecks, llenan de alegría y diversión las calles. El concepto del disfraz nace mucho tiempo atrás, ya que la idea era portar una máscara para poder ocultar la identidad durante los actos donde estaban permitidos todo tipo de excesos y libertinaje.
¿De dónde surgió esta festividad?
Se dice que el carnaval llega a Alemania junto con los romanos. Después los paganos lo utilizaron para ahuyentar a los demonios del invierno, pero fue hasta la Edad Media cuando los católicos adoptaron esta forma de celebrar los 40 días antes de la Cuaresma. Los primeros festejos se dieron en el año 1823 en Colonia y dos años después en Düsseldorf. Posiblemente esta es la razón por la cual la festividad en estos dos lugares son un aspecto único, aunque competente.
Los archienemigos
Colonia y Düsseldorf son las dos ciudades más grandes del Estado de Nordrhein-Westfalen y que resultan ser vecinas; solo 45 kilómetros las separan. Una de las cosas más sonadas entre estas dos ciudades es su larga carrera de enemistad. Su rivalidad es tal cual a la rivalidad de dos hermanos competitivos que pelean para ser mejor que el otro.
Si nos vamos muchos años atrás, Colonia fue colonizada por los romanos y la convirtieron en el lugar más importante de la comercialización mediante el río Rhine. Durante ese tiempo, Colonia se transformó en el líder económico de la zona. Por otro lado, Düsseldorf creció de manera lenta y orgánica. Fue gracias a la industrialización que esta ciudad paso de ser una pequeña aldea a convertirse en la capital de la región. O sea, en resumidas palabras, Düsseldorf le quitó la corona del territorio a Colonia.

Se dice que la rivalidad de estas ciudades es por esta razón; de ahí su infinita competencia entre sus cervezas, sus equipos de fútbol, sus Carnavales y sobre muchas otras cosas.
Las dos ciudades celebran el Carnaval, sin embargo, cada una lo hace a su típica manera. En Colonia, los desfiles son muchísimo más grandes con carrozas elegantes y divertidas que se destacan por mucho. En Düsseldorf, sus desfiles son más cortos por lo pequeña que es la ciudad, y sus carrozas suelen tener mensajes con sátira política. En Colonia, te dan tabletas de chocolate o cajas de bombones, mientras que en Düsseldorf te avientan caramelos y muestras de champú.
Por último pero no menos importante, cada ciudad tiene su propio saludo en Carnaval. En Colonia es Alaaf!, mientras en Düsseldorf es Helau! Es crucial no confundirlos, pues si lo haces probablemente habrá gente que te querrá desterrar de su ciudad.
Lastimosamente, como consecuencia de la pandemia, las celebraciones oficiales que usualmente se presentan a finales de febrero y principios de marzo, fueron pospuestas al mes de mayo donde se espera que los índices de contagio estén bajos y los alemanes puedan celebrar en todo furor Karneval. ¡Esperaremos ansiosamente las carrozas, los disfraces, la música y los dulces! ¡Helau!